Yo no uso TT
Pero hace un tiempo conversé con el maestro que esta haciendo una ampliación de mi casa.
Es un buen chato, connacional, levemente sobre los 50 y con un buen estado físico producto de su oficio. Al tipo lo conocí como evangélico hace más de 10 años.
Resulta que se separó hace un par de años cansado de las escenas y el control de su esposa. Sin embargo, continuaron viviendo bajo el mismo techo.
Se hizo una cuenta de TT donde subía videos de las obras que realizaba y otras yerbas como consejos de mantenimiento para dueñas de casa.
Pasó que la esposa lo pilló que había bajado la aplicación y le advirtió que se olvidara de cualquier posibilidad de retomar la relación matrimonial si continuaba en esa aplicación. Le dijo que se le iba a abrir “un mundo nuevo”.
Pude comprobar que este chato salió medio zoófilo. Me contó que la cantidad de invitaciones y citas que le llegaban, principalmente de mujeres caribeñas, era impresionante.
Según él fue tanto su impacto que podía armar un calendario de jueves a domingo y seleccionar las damas de compañía semana por semana.
Me decía “jefe, si yo le mostrara las minas que me mandaban fotos, así piluchas, no lo creería”.
Finalizó contándome que tuvo que dejar esas andanzas, no porque no le gustara, sino por el desgaste físico y sexual que le generó.
— No sabe ná lo que son las venezolanas. Le piden una vez y otra vez y quieren más. Ellas disfrutan mucho la cosa sexual, na que ver con las chilenas que sienten culpa. Una vez quedé en vergüenza porque ya no se me paraba, ni con viagra.
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Así que ahí tienen, culantros, el verdadero motivo del por qué TT es un vicio.
