Mi taita era muy celoso con sus cosas, sobre todo con el auto. No se lo prestaba a ninguno de nosotros. La cosa es que a los días de fallecer, mis hermanos querían ocupar el auto y cuando le hacían contacto, bajaba la tensión en la casa, con un ruido eléctrico como de generador en mal estado, y el auto no partía, le daban contacto de nuevo con la llave y lo mismo, bajaba la tensión eléctrica en toda la casa con ese sonido, dijimos “el viejo hasta después de muerto no te va a pasar el auto” jajajaja
Bertismo puro y duro.